El asombroso desenlace de la triste historia de la Mugrosita

Después de pensarlo mucho, decidimos que Mugrosita estaría mejor con una compañera de trabajo de mi pareja, cuya hija de 5 años muere de ganas de tener un perro. Hablamos con la hermana de Trying para decirle que irían a recogerla pasadas las 5 pm. La noticia la entristeció un poco (ella era una de los candidatos mas fuertes) pero puso feliz porque la perra habia conseguido casa. La hemana de Trying tiene una chihuahua diminuta que recibe trato de bebe y que con la llegada de Mugrosita se puso muy celosa.

Ayer en la noche, mientras “su mama” cargaba a Mugrosita. Missy le miraba con cara de “Whata hell?” Seguramente a ella no le dolió que se la llevara otra familia.

Pero a veces las cosas cambian radicalmente de un momento a otro: Cerca de las cuatro, cuando mi pareja regresaba del trabajo, noto que en una calle cercana había letreros en todos los postes

A pesar de ser una fotocopia, Mugrosita era perfectamente reconocible, asi que llamo por teléfono y le dijo a la mujer que contesto que creía haber encontrado a su perra. La mujer se soltó a llorar y entre sollozos le contó que la perra era de su nieta y que la dejaron en su casa mientras sus padres finiquitaban el divorcio y arreglaban su vida. Según su historia, la perra aprovecho que ella dejo la puerta abierta y salió sin que la mujer lo notara. Ella regresó a casa y cerro sin darse cuenta del que Mugrosita se había quedado afuera. Después de algunas llamadas telefónicas para detener de ultima hora la adopción, Trying recogió a la perra y la fue a entregar a su dueña. Mugrosita, al ver a la mujer, comenzó a mover la cola muy emocionada, dejando claro que en verdad era su dueña.

La historia de la mujer tiene algunos puntos obscuros, como el hecho de que en el anuncio dice que la perra se perdió la tarde del miércoles, siendo que nosotros la encontramos el martes a las 9 pm, tampoco nos explicó porque la perra estaba tan sucia y olía tan mal, siendo que llevaba perdida un par de horas y la encontramos a escasos 200 metros de su casa, ni la razón por la cual no portaba Mugrosita ni collar ni placa de identidad. Pensamos que la historia del divorcio es real, y que la mujer daba asilo a la perra mientras los padres solucionaban su asunto, pero que aunque le daba techo, no cuidaba de ella, y que la perra se extravió el martes y la señora lo notó apenas el miércoles por la tarde, y no hallaba la manera de explicarle a la nieta el extravió. Me cuenta Trying que el llanto de la mujer al cargar a Mugrosita (quien, por cierto, en realidad se llama Minie) era muy real, pero tenia aroma de remordimiento. Y Trying tiene un olfato especial para esas cosas.

No queremos juzgar a nadie, creemos que lo importante es que Minie haya regresado a casa con bien, aunque siempre sorprende la capacidad de amor que tienen los animales que quieren a sus dueños a pesar de que el trato que reciben no corresponda al cariño que ellos sienten.

Si debe haber una moraleja en esta historia es que se debe escarmentar en cabeza ajena: Yo se de un par de gatos cuya suscripción al sistema de rastreo en caso de extravio, de los chips que llevan en la espalda ya caducó y debe renovarse.