Daniel

Una de las cosas buenas que nos han pasado en estos días y que no había podido guardar aquí fue la ultima visita del cartero, quien como no pudo meter este sobrezote por la rendija del buzón, se lo entregó a Trying personalmente:

Directo de Mar del Plata, Argentina, una carta de D.

Y así como era de grande, venía lleno de cosas hermosas:

Dos monederos, uno con la imagen del cuadro de Frida Khalo “Yo y mis pericos” y otro con la famosísima foto del Che Guevara tomada por Alberto Korda en 1960. D nos dio a elegir quedarnos con la que nos gustara a cada uno. Adivinen cual me quede yo y cual Trying ;)

Un set de stickers acolchados, muy modernos pero con sabor ochentero que han sido la delicia de Trying. La imagen muestra 4 que estan adheridos a la lap de Trying. Supongo que D, siendo tan observador, se dió cuenta de que a Trying le gusta pegarle etiquetas a su lap por una foto que alguno de los dos subimos donde  se alcanza a ver incidentalmente el aparato. La verdad este detalle nos sorprendió mucho, el notó esto y yo, en cambio, ni siquiera recuerdo quien o cuando subimos esa foto =)

Un mapa de Buenos Aires que es, además, una guía para su servicio de transporte urbano. Dice D que por ahí nos marcó su casa. Un día espero podamos usar este plano en el terreno de lo real.

Un par de brazaletes tejidos Uno rojo con negro y uno rosa con negro. Se supone que no son brazaletes, sino tobilleras, pero yo preferí modelarlo en la muñeca. (¿El par de visibles cicatrices? Bueno, mi trabajo no es bonito... pero el brazalete se mantendrá a resguardo en horas de trabajo)

Dos libros, uno de Borges para mi y uno de Steinbeck para Trying. Tengo que confesar mi gran incultura: He leído en mi vida apenas un par de cuentos de Borges y este poema, al cual le debo, que en el esfuerzo de evitar su sentencia, se haya ido formando de manera casi autónoma esto que llamo mi vida:

 

He cometido el peor de los pecados
que un hombre puede cometer. No he sido
feliz. Que los glaciares del olvido
me arrastren y me pierdan, despiadados.

Mis padres me engendraron para el juego
arriesgado y hermoso de la vida,
para la tierra, el agua, el aire, el fuego.
Los defraudé. No fui feliz. Cumplida

no fue su joven voluntad. Mi mente
se aplicó a las simétricas porfías
del arte, que entreteje naderías.

Me legaron valor. No fui valiente.
No me abandona. Siempre está a mi lado
La sombra de haber sido un desdichado.

Gacias a este ultimo regalo he empezado a ponerme al corriente con Borges.

Y por, supuesto, dos cartas, una para mi y otra para Trying. Me sorprende y me encanta la manera de escribir que tiene D, es como si nos nos dejara entrar en su mente en vez de solo tomar una hoja de papel y lanzarse a enviarnos un mensaje. La gente más brillante que he conocido tiene esa cualidad en común: Cuando escribe abre puertas.

Ya estamos planeando la respuesta.

¡Mil gracias D!